Este blog pretende ser el diario resumen de las salidas y viajes de sectamtb
Un grupo de mtbikers de Mallorca.

martes, 23 de agosto de 2011

ALPS 2011. GRAUBÜNDEN I. 8,9,10 i 11 agosto

Al final después de un periodo de indecisiones el viaje se decantó por la opción más cómoda un recorrido organizado por una empresa suiza BIKEXPLORER. Ellos se encargaron de hacernos las reservas, nos pasaron los track y nos trasladaban el equipaje. Todo un lujo para estos tiempos de crisis.


Lunes 8 de Agosto Palma –Milan- Chur


Tal como estaba previsto avión directo hasta Malpensa. 6 sectarios: Pietro, Jeroni, Yerar, Bigel, Frenando y Mapes mas el espíritu de VP, que tras una inoportuna caída la semana antes, con operación de reconstrucción de vértebra incluida, no pudo venir. En Milán nos recoge el transfer de la empresa de alquiler de vehículos y nos lleva hasta nuestra furgoneta y nuestro magnifico Cinquecento, el pobre no estaba preparado para llevar a 4 “goranots” por las rampas del puerto de san Bernardino, amen, que seguro se sentía menospreciado por las duras criticas de Pietro, que no soportaba viajar en un vehiculo de esta categoría. Al final, después de rectificar el recorrido ya que el magnifico GPS de Jeroni nos llevaba a Suiza por carreterillas por no pagar peaje llegamos a Chur. Tras la cena en la que nos enteramos bien de los precios del país montamos las bicis y todo a punto para el primer día. “cling- cling”.



Martes 9 Agosto Chur- Savognin. 53 km 1663 mt de desnivel.


Salimos de la histórica ciudad, capital del cantón de Graubünden deshaciendo la marcha que habíamos hecho con el coche, es decir, dirección sur, primero por caminillos paralelos a las vías del tren y luego ya por los bosques del gran valle de acceso a Zurich desde Italia. Pueblecitos enlazados con pistas perfectamente cuidadas fueron la tónica general hasta que nos desviamos hacia un valle mas secundario que se dirigía hacia Saint Moritz.


Allí aparecieron las primeras rampas importantes con el primer túnel excavado en la roca. Aparte de esto el recorrido fue bastante facilón y algo monótono, añorábamos un poco aquellas etapas épicas de las transalp.
Al final llegamos a “THE CUBE” nuestro hotel que ya habíamos visto por Internet. Un magnifico cubo de cristal insertado en el fondo del verde valle junto a un laguito donde nadar. Fue lo mejor de la jornada, descubrir como se puede montar un hotel a medida para deportistas. En invierno esquiadores y en verano mountainbikers. Entramos y en la recepción ya estaba nuestro equipaje, allí nos indicaron que podíamos subir las bicis hasta la habitación subiendo por una rampa muy divertida con pantallas que enseñaban imágenes de descenders. Al llegar a la habitación la sorpresa: Un pequeño hall cerrado con cristal donde colgar las bicis con un banco y estantes donde dejar todo el material de la bici que así no molestaba en la habitación. Todo un lujo.



Cena de buen rollo con mas bikers y senderistas y paseo por el pueblo. En recepción pedimos para cambiar moneda ya que a nadie se le había ocurrido cambiar. Solo nos pudieron cambiar algunos euros, asegurándonos que por la mañana tendrían más moneda. Lastima que las bolsas se estaban desmoronando y por la mañana nos informaron que el cambio era 1 a 1 es decir casi un 20 % mas que el día anterior. Al final cambiamos por no pasar el apuro del día anterior de no estar seguros si podríamos pagar en euros las “golafrerias” del día. “cling- cling”.


Miércoles 10 Agosto Savognin - Pontresina 64 km 1943 mt desnivel.


Segunda etapa, nos despedimos del CUBE dejando nuestro equipaje con las etiquetas de nuestro próximo destino, en este país totalmente conectado por red ferroviaria aun existe un servicio de paqueterías por tren, así que mientras nosotros rodábamos, nuestras bolsas viajaban en tren. Salimos del pueblo y pronto estábamos subiendo por cómodas pistas por dentro de frondosos bosques, el desnivel se acumulaba rápidamente pero sin grandes esfuerzos, así llegamos al primer lago, el de marmorera, que lo rodeamos por carretera hasta que de nuevo por pista nos adentramos en el primer paisaje mas o menos alpino con el primer collado, el septimerpass, pista de subida y sendero divertido al principio y algo pestoso al final y de nuevo carretera para subir el collado de Maloja que nos dejo en el altiplano de los lagos de Segl, Silvaplauna y Saint Moritz.



Montón de kilómetros de pistas junto a los lagos, repletas de paseantes pijos de toda Europa. Poco a poco nos fuimos agobiando. En las primeras rampas del día habíamos dejado a Claudio con su osito de peluche colgado del camel y su mujer que coincidían en ruta, pero ahora las señoras sesenteañeras nos pasaban y no había manera de alcanzarlas ya que eran autenticas virtuosas en ir esquivando cochecitos de mamas con niños. Al fin Pontresina, pueblo tan pijo como Saint Moritz, autentico paraíso de Ferraris, Porsches etc etc y como no, nuestro hotel al nivel de la población. Pero no todo es tan perfecto en Suiza, ya que al llegar, aun no estaba nuestro equipaje, así que hicimos algo de tiempo, limpiamos las bicis en el espacio habilitado para ello junto al guarda bicis del hotel y despues nos fuimos a la terraza- jardín a esperar y gastar unos cuantos, muchos, mas euros en helados. Al final ni Claudio ni las maletas llegaron, tras algunas gestiones conseguimos averiguar que estas se habían quedado en Saint Moritz, por lo que el conserje del hotel tuvo que bajar hasta ese pueblo a recogerlas. Duchados y vestidos de gala, nos fuimos a cenar del menú establecido en el pack. Las bebidas como siempre no entraban y ya sabíamos que por una coca cola no bajábamos de los 6 euros “cling- cling”.


Jueves 11 Agosto Pontresina Müstair 75 km 1523 mt desnivel.


Salimos de Pontresina dirección al paso de Bernina, al principio por dentro del bosque siguiendo mas o menos el trazado del tren que aprecia y desaparecía y luego por carretera, así lo indicaba el track mientras nosotros veíamos magníficos senderos que mas o menos seguían nuestra dirección, hasta que al final decidimos dejar el Gps y seguir nuestra orientación, ahora si, por divertidos single traks alcanzamos el lago Bianco ( blanco ya que recoge las aguas de un glaciar) tras el paso, rápida bajada por carretera para enlazar un hermoso sendero que nos lleva ya de nuevo a la carretera del paso fronterizo de Forcela de Livigno, en donde entramos en Italia. “Home sweet home”. De nuevo pasamos del track y bajamos por magníficos senderos hasta el lago de Livigno en donde comimos una buena pizza Italiana, a precios Europeos.



Pero de nuevo tocaba reiniciar la marcha y abandonar nuestra querida comunidad Económica, así que iniciamos la marcha por las fuertísimas rampas del valle Alpisella, tal como había imaginado en el plano, al fin parecía que estábamos en los Alpes que nos gustan, valles mas o menos solitarios lejos de la civilización, así sin darnos cuenta entramos de nuevo en Suiza por el paso val Mora, siguiendo un sendero de estos en los que no hay posible error.



Este narrador en este punto ya estaba decidido, no podía seguir con la bici, ya que la biela rozaba continuamente con la baina trasera ya que el tambor que aguanta la suspensión trasera se había despegado del carbono y toda la bici flambeaba. Al final llegamos a Müstair. El pueblo al contrario de todos los anteriores respiraba un autentico aire rural, Así el día que uno hubiera querido civilización para poder alquilar una bici, no la tubo.



Hotel rústico de estructura de madera con un propietario enrollado que hablaba castellano. Él fue quien me aconsejo para el día siguiente ir hasta Scuol por carretera por el Paso del Fuorn. Cena, paseo por el monasterio y a dormir. Este narrador como no podía conciliar el sueño, a media noche, se conecto por Internet, quería consultar la mejor ruta, tiendas en scuol, etc etc, así lo hizo y ahora llegará la suculenta factura de Internet en el extranjero…“cling- cling”.

1 comentario:

cecil dijo...

Joderrrr que aburridos soys podeis poner fecha para la cena y el aburrimiento yaaaaa