Que buenos son los padres Teatinos, que buenos son que nos llevan de excursión..
Enero y febrero son los meses de máximo apogeo de caza, así que para evitar encontronazos molestos, tal como se puede leer en crónicas de otros grupos, nos dedicamos a hacer salidas por el resto de la isla. Y es que se ha de ser muy novato, inconsciente o follonero para hacer rutas por ejemplo por na Burguesa a primeras horas de la mañana de un sábado en plena época de caza. Hay que recordar que la mayor parte de esta sierra es un gran Coto ubicado en fincas privadas y con una situación dudosa de los caminos que la atraviesan, así que si continúan los encontronazos los que saldremos mas mal parados seremos los bikers, que veremos cómo se acabará vallando y blindando toda la zona.
Así pues decidimos hacer una salida por el norte de la isla. Hace unas semanas el tibu nos comentaba que en Son Sera de Marina, que es donde ahora vive como un Robinson Crusoe, es un agujero negro de rutas de MTB, por lo que decidimos ir hasta allí por caminos que hacía años por los que no pasábamos. Básicamente la ruta se organizaba sobre el que algún día será el GR de la ruta de Arta a Lluch. Este GR también debía estar regulado con un plan especial, que quedo a punto de ser aprobado en la pasada legislatura, pero que como tantas otras cosas, ha quedado aparcado en algún cajón del Consell y ha desparecido misteriosamente de la web de dicha institución.
8:15 de la mañana en la estación de Inca llega el tren y desembarcan Jon Ander y Pietro, que son los únicos que se atreven a usar aun este medio que nos ha expulsado y nos obliga a ir con nuestros coches (aquí se potencia el trasporte público y no contaminante permitiendo que solo 4 bicis viajen en cada convoy) Tras reagruparnos con los 4 del raiguer que han venido en bici mas los 9 restantes iniciamos la marcha atravesando Inca y pronto nos encontramos en carreterillas que nos llevan hacia el oscuro y pedregoso camino del encinar de son Catiu.
Cruzamos la carretera de Muro y seguimos mas caminos hasta Llubi en donde atravesamos el torrente de Vinagrella que por suerte no llevaba agua.
Pasado Llubi nos “encalomamos” por las duras rampas del Arrabal y ya por un magnifico camino que a ratos se convierte en sendero, nos dirigimos hacia Santa margarita. Siempre que llevamos a alguien por alli queda sorprendido ya que no es habitual un camino que vaya por la cresta de una cornisa de estas pequeñas sierras que se dan por el plà y en la que se puede divisar por un lado María y Sineu y por el otro la bahía de Alcudia.
Llegamos a Santa Margalida y tras un largo trozo de asfalto entramos en Son real, siguiendo el camino publico que atraviesa la parte privada de la finca, en la que se quería construir un campo de Golf. Tras atravesar la carretera entramos en la parte pública y disfrutamos de los magníficos caminos que en suave descenso nos llevan hasta el Mar. Menos mal que solo somos 15 y no hemos necesitado solicitar una autorización al Govern, porque sino el paseíto por la finca publica nos hubiera costado 2 €por persona.
Al llegar a la playa llega el tramo duro de la ruta, porque pese a que la pendiente sea cero, rodar por arena es peor que subir un rampa del 20% , asi cada uno va buscando la mejor trazada mientras el grupo se dispersa hasta que al final llegamos a tierra firme y podemos cruzar en un momento toda la fantasmagórica urbanización de Son Serra para poder llegar al Bar Lago, en donde nos espera Tibu con mesa ya preparada . Muy buena merienda a precio especial de cliente surfero.
Mientra comemos empieza a llover, “MALDITO MALDONADO” últimamente no da pie con bola, Este narrador abre el móvil y fran es testigo de que como al abrir la pagina con la predicción para son Serra salen unos esplendidos soles que desaparecen en segundos al actualizarse la pagina.
Ya no hay marcha atrás y hay que regresar hasta Inca aunque nos parece que estamos en el fin del mundo. Nos enfundamos los chubasqueros, los que lo llevamos, y los que no, se fabrican uno como pueden para asi reiniciar la marcha.
Camino en suave ascenso hacia las casas de Son Serra y al llegar a la carretera de Arta nos damos cuenta que ya vamos totalmente empapados y parece que no va a aparar, así aparecen las famosas tijeras y se decide que en lugar de meternos hacia el torrente de na Borges iremos por el cami vell de Ariany. Tras un breve titubeo abandonamos el track que nos había estado guiando y ponemos en marcha la memoria Ram interna, que en la actualidad está algo perjudicada ya que no cuenta con el complemento de todos los megas que almacenaba Cecilio.
Aunque no sea el recorrido oficial, todos quedan sorprendidos por este curioso sendero en forma de túnel entre las matas de varios kilómetros que nos deja muy cerca de Ariany. Pero como hemos dicho, la memoria de este narrador ya no es lo que era, y en un momento de confusión generado por el puto GPS que al estar en modo navegación y fuera de track no paraba de cambiar de escala, dirijo a las tropas hacia Petra en lugar de Ariany por lo que alargamos el recorrido. Hasta que no salimos de la hondonada del torrent de son baulo uno no recupera las coordenadas de referencia. Ahora si, Bonanay al oeste, santa magdalena al norte. Empapados como estamos y tiritando de frio toca retirada por la vía mas rápida, así que tras atravesar Petra enfilamos la antigua carretera de Sineu en la que los veloces se ponen a tirar dejando un reguero de cadáveres. Tras Sineu el grupo de cabecera recupera el track y por carreterillas va hacia el “empalme” actualmente “enllaç” mientras que los de cola enfilamos carretera directamente por lo que al llegar a Inca llegamos todos en grupo con 85 km y solo 650 mt de desnivel.
2 comentarios:
Encara tenc ses mans gelades!! Vaja volta rodadora, vaja ritme,xulo,xulo...
Si no os depilaseis tanto no tendríais tanto frío, nenazas.
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