Mínima convocatoria con tan solo 6 sectarios presentes;
Pere, Jeroni, Miki, Salva, Biel y yo. No teníamos claro dónde ir, pero la
ultratrail con dos mil patapollos surcando la tramontana nos decantó por coger
la opción rodadora de Pere, y visitar la zona de Cabo blanco y Cala Pi.
La salida de palma fue demasiado urbana y algunos cortes de
calles nos llevaron a dar algún que otro rodeo hasta poder llegar al carril
bici del arenal, en el trayecto nos envolvería una densa niebla que haría que
nos pusiéramos en fila de a uno por precaución ante la baja visibilidad,
afortunadamente no duró mucho y el día fue abriendo poco a poco. Al final del
Arenal tomaríamos el desvío a la izquierda hacia el torrente de Son Veri y tocaríamos tierra por primera vez, por las trialeras
plagadas de cacas de perro. Después asfalto hasta el Aqualand donde volveríamos
a la naturaleza pasado por zonas de kleenes . (Es una pena comprobar como cuando
la naturaleza se encuentra próxima a la civilización, como el hombre, o sus mascotas
se encarga de ensuciarla). Tomamos las antiguas vías del tren, pasando por la
Depuradora y llegamos hasta las palmeras. Después pondríamos rumbo directo a Cabo blanco
pasando por las urbanizaciones de Maioris y Bahía azul, a la altura de Sa torre
un ciclista con casco aerodinámico tipo Alien nos adelanta y Miki que es muy
chulo se le pone a la rueda, Jeroni y yo le seguimos, y durante unos breves
e intensos segundos nos ponemos llaneando a 44Km/h, el Alien que
nota que lleva carga detrás, cambia de ritmo y nos descolgamos, volvemos a poder volver a respirar aliviados. Nos desviamos del aburrido asfalto por el camí de presos (que construyeron los prisioneros de la guerra civil) y entramos por la zona militar a Cabo Blanco, tomamos el divertido camino de la costa con su árido paisaje de piedras gastadas, en
contraste con el azul del mar. Esta es sin duda la mejor zona de la vuelta por el paisaje y
por la exigencia de conducir la bici con habilidad para sortear mejor las
piedras.
Después de dejar la zona militar vemos que un helicóptero del SAR nos
sobrevuela a corta distancia y tenemos la anécdota del día ya que el aparato
toma tierra durante unos breves segundos justo a unos metros por donde pasamos.
Llegamos a Cala Pi y podemos disfrutar de las vistas de una
de las mejores calas de Mallorca. Tras vacilar un poco por donde pasar al final
decidimos tirarnos a la arena y bajar a la cala, allí nos miran con extrañeza algunos pocos bañistas (guiris en su totalidad) que son capaces de soportar las gélidas aguas del mes de Abril.
Porteamos las bicis por las empinadas escaleras y regresamos al caluroso asfalto, para regresar otra vez a la preciosa costa presidida por la torre de vigilancia "s´estalella", con un nuevo tramo de divertidas piedras.
En una de ellas mi rueda delantera pincha pero al tener líquido reciente no tarda en sellarse. Esta sería la única incidencia de la ruta. Ya van pesando los kilómetros y el estómago se queja y decidimos tomarnos un pamb oli en S´estanyol. Buen servicio, rápido y con abundantes bebidas por 6 euritos y tertulia variada.
Sin demora volvemos al asfalto tomando la carretera militar, ahora ya aprieta el calor y ponemos un buen ritmo llaneando por los caminos de tierra de llobets y des lladres, hasta llegar a Llucmajor, allí Salva que estaba notando molestias en la espalda nos deja para tomar rumbo más directo hacia Palma.
El resto continuamos y como íbamos bien de piernas y de tiempo, optamos por subir hasta Algaida para coger el siempre divertido Torrente de Son gual.
Tomamos el camí de son mandivia y el de muytanya y la carretera vieja de Algaida. Un poco después Pere nos abandonará también, y quedaremos 4 gatos que bajamos raudos y veloces por el Torrent de Son gual. Seguimos con un ritmo alegre hacia Son Ferriol, aunque esta vez algo castigados por el viento en contra, nos desviamos por indicación de maese Biel hacia “Aceitunas Pérez” huyendo de los coches y llegamos a Palma, algo tostados.
Porteamos las bicis por las empinadas escaleras y regresamos al caluroso asfalto, para regresar otra vez a la preciosa costa presidida por la torre de vigilancia "s´estalella", con un nuevo tramo de divertidas piedras.
En una de ellas mi rueda delantera pincha pero al tener líquido reciente no tarda en sellarse. Esta sería la única incidencia de la ruta. Ya van pesando los kilómetros y el estómago se queja y decidimos tomarnos un pamb oli en S´estanyol. Buen servicio, rápido y con abundantes bebidas por 6 euritos y tertulia variada.
Sin demora volvemos al asfalto tomando la carretera militar, ahora ya aprieta el calor y ponemos un buen ritmo llaneando por los caminos de tierra de llobets y des lladres, hasta llegar a Llucmajor, allí Salva que estaba notando molestias en la espalda nos deja para tomar rumbo más directo hacia Palma.
El resto continuamos y como íbamos bien de piernas y de tiempo, optamos por subir hasta Algaida para coger el siempre divertido Torrente de Son gual.
Tomamos el camí de son mandivia y el de muytanya y la carretera vieja de Algaida. Un poco después Pere nos abandonará también, y quedaremos 4 gatos que bajamos raudos y veloces por el Torrent de Son gual. Seguimos con un ritmo alegre hacia Son Ferriol, aunque esta vez algo castigados por el viento en contra, nos desviamos por indicación de maese Biel hacia “Aceitunas Pérez” huyendo de los coches y llegamos a Palma, algo tostados.
En resumen buena ruta, buen rollo, buen ritmo, y muy bien los
orientadores.
111Km con 500 de desnivel y una media de 21,4 km/hora. Llegando a las 14:40 a Palma.
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=9434685
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=9434685
3 comentarios:
buena cronica, veo que miky no pudo coronar, pero si que hizo de las suyas y es que esta fprtissimmm
Buena crónica Fran y buen dominio de la toponimia,
Buena crónica Fran y buen dominio de la toponimia,
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